Claudia Sheinbaum la Mujer Más Poderosa de México
Conforme al artículo 83 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, este establece que el Presidente de la República durará en el cargo 6 años y no puede ser reelecto, es así como cada sexenio se convoca a elecciones federales para que el ciudadano con su voto ejerza su derecho a elegir a quién será su próximo Jefe del Ejecutivo, como lo acabamos de vivir en una contienda electoral histórica, la más grande donde el pueblo con su poder del voto ciudadano en las urnas se eligieron más de 20 mil cargos de elección popular, en la cual según su percepción personal eligió a quienes tomarán las decisiones y marcarán el rumbo de nuestro amado país México. Si la decisión fue o no la mejor opción, eso se verá reflejado de inmediato en el diario acontecer nacional.
En esta ocasión, quien llevará las riendas de la nación es la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, quien llega a la codiciada Silla Presidencial como la mandataria nacional con mayor poder y fuerza política de la época reciente en nuestro país, básicamente sin contrapesos, con mayoría morenista en el Congreso de la Unión y en el Senado de la República y ahora con la recientemente aprobada Reforma al Poder Judicial, señalan los expertos en el tema que con esto se desvanece la autonomía de poderes y todo se inclinará a favor de la toma de decisiones del Poder Ejecutivo Federal, lo cual sin lugar a dudas, hoy por hoy, coloca a la Comandante Suprema de las Fuerzas Armadas, Claudia Sheinbaum, como la mujer más poderosa de México, como sucedió en su momento con algunos ex presidentes priistas con un partido hegemónico, mayoritario, que en la toma de decisiones los legisladores de su partido que son mayoría, indiscutiblemente aprueben toda iniciativa de ley o reforma que les envíe la máxima autoridad del país, como lo es en este caso la Presidenta de la República.
Claudia Sheinbaum, sin lugar a dudas recibe un país con diversos problemas que su antecesor López Obrador no puedo o no quiso solucionar, (simplemente culpando a los anteriores pero no resolviendo los problemas como lo prometió en campaña) y que aquejan a la gran mayoría de los mexicanos; como son la creciente inseguridad, la falta de medicamentos y tratamientos en el sector salud principalmente en el tema de cáncer infantil, la falta de crecimiento económico, una multimillonaria deuda mayor a la de los anteriores gobiernos, la desmedida inflación que afecta principalmente el bolsillo y bajo nivel de vida de los más pobres (aún cuando uno de sus lemas fue, “primero los pobres”) y la violencia extrema que deja, por tan sólo mencionar algunos.
Los tiempos cambian y la manera de hacer política también, por ende, no debemos aceptar que se normalice que los políticos en busca del voto ciudadano ofrezcan múltiples promesas que en su mayoría en el fondo bien saben que no cumplirán si son favorecidos con el sufragio del pueblo, ya basta de tolerar promesas de campaña incumplidas, como el rayito de esperanza de López Obrado que se convirtió en el rayito de desesperanza.
En su momento Enrique Peña Nieto durante su campaña ante notario público firmó 266 compromisos, de los cuales solamente cumplió una parte de ellos. Andrés Manuel López Obrador hizo 100 ambiciosos compromisos y antes de dejar el poder señaló que cumplió 95, con lo cual seguramente la gran mayoría no coincidimos con él.
Ahora en su toma de protesta donde le fue colocada la Banda Presidencial, Claudia Sheinbaum dio a conocer su programa de gobierno con los 100 compromisos que ofreció durante su campaña presidencial, de los cuales duraste estos 6 años constataremos si realmente sí los cumple como la primera presidenta de México.
Desde el momento de su primer mensaje ya como presidente Andrés Manuel dijo, “no les voy a fallar”. Por su parte Claudia Sheinbaum ya en el poder también aseguró; “no les voy a fallar”. Esperemos que así sea y no como ocurrió con AMLO en 6 largos años.
En otro orden de ideas, en el Congreso de la Unión en el acto protocolario como lo es la toma de protesta, a diferencia de sus antecesores, Claudia Sheinbaum inició su discurso vanagloriando los (supuestos) logros y gestión de Obrador, a manera de despedida fraterna de su gran amigo, camarada de incursión política y compañero de partido, primero en el PRD y ahora en Morena, y criticó a los anteriores, algo que simplemente no venía al caso, no era el momento ni la tribuna indicada para hacerlo.
En otro orden de ideas, es importante destacar que los objetivos principales y retos de la actual mandataria son el lograr la reconciliación nacional, erradicar la actual polarización que desde Palacio Nacional fomentó con sus discursos su antecesor, combatir y finalizar con la actual violencia, realmente acabar con la pobreza extrema principalmente en las zonas más marginadas y rurales, gobernar para todos los mexicanos y no solamente para sus simpatizantes y seguidores, ya que finalmente todos somos ciudadanos y pagamos impuestos, con los que se cubren sus sueldos, sus generosos gastos de representación y se financia el gasto de administración, de instituciones, de obras diversas y los programas sociales, entre otros gastos que se cubren con la recaudación de impuestos oportunos a través de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público.
Pero lo primordial para México y los mexicanos es que su gestión sea totalmente autónoma, con una visión de crecimiento económico, excelentes servicios de salud con eficiente abasto de medicamentos y tratamientos especializados, una verdadera equidad de genero, mantener un estado de derecho solido que brinde confianza a la inversión nacional y extranjera, combatir a la delincuencia organizada con una afectiva estrategia de investigación y localización de los grandes capos de los diferentes carteles, mantener finanzas sanas sin una lastimosa inflación como la que tenemos actualmente y continuar con algunos programas sociales, principalmente con los adultos mayores, y para los jóvenes ya no programas de ayuda para los ninis, lo ideal es brindarles aprendizaje especializado con cursos de alguna profesión técnica para que se preparen, puedan trabajar y sean capaces de su auto manutención y apoyo a sus familias mediante su trabajo.
Una Frase Para Fin de Semana
No al segundo piso de la cuarta transformación.
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